Cubrir el fondo de la paellera con el aceite, picar pequeñito la cebolla, el ajo, puerro, (el puerro es la verdura imprescindible para que quede un buen sabor en la paella, es como el ingrediente secreto), y pimiento verde y rojo.
Pochar todo, cuando esté dorada la cebolla y las demás verduras, poner las almejas para que se abran, cuando estén ir poniendo los calamares, el pescado, dar vueltas y que se hagan un poco, cuando estén poner la carne si va a ser mixta, el pollo, costillas, salchichas, conejo etc.
Rehogar todo despacio, echar el arroz y por una medida de arroz son dos de agua.
En una cazuela aparte pon los mejillones sin agua, sin nada solo tapados y se harán al vapor y soltarán el agua que ellos traen al abrirse. Esta agua le utilizarás para hacer el arroz.
Rehogar también un poquitín el arroz, y ya poner el agua contando con el agua de los mejillones. Esta agua debes colarlo para que no tenga arena. Echar una hoja de laurel, el tinte o cúrcuma, las pimientas y debes probar el caldo para saber si necesita sal, porque el agua de los mejillones es salada.
Un poco antes de apagar el fuego pon los gambones y los mejillones con una cascara o sin ninguna como mas guste.
Puedes adornar la paella poniendo intercalados un gambón, un mejillón y una rodaja de huevo cocido. Dejar cocer 5 minutos o algo menos.
Debes saber que el arroz coge la sal en el momento de cocción, si te queda soso una vez cocido no coge ya la sal.
Cuando el arroz esté algo tierno pero aún no esté hecho del todo, ese es el momento de apagar el fuego y dejarlo reposar, se terminará de hacer solo, así no se pasará, debe quedar hecho y suelto.